05 mayo 2005

Primer libro de testimonios de mujeres y hombres que han abortado en España

Desde 1985 un millón de abortos quirúrgicos y   varios más de abortos químicos, dentro de la legalidad constitucional. No permanezcas   indiferente ante una legislación tiránica

"Yo aborté"

por Victoria Uroz

Una labor de recopilación y entrevistas a afectados por el aborto provocado, mostrado qué le pasa a la mujer y a su pareja

Se trata de un libro sin precedentes en nuestro país. Ninguno ha mostrado todavía qué le pasa a la mujer y a su pareja cuando abortan en España: qué pasos han seguido, qué han vivido, cómo han sufrido después. En este mes de mayo de 2005 sale a la venta "Yo aborté" ( Editorial Voz de Papel) y podrá adquirirse en toda España. Ha sido una labor de un año de recopilación y entrevistas a afectados por el aborto provocado.

Sara Martín García, periodista de La Razón y responsable del Gabinete de prensa de AVA, ha realizado la labor de síntesis y orden en los diecisiete testimonios, ayudada por voluntarios de la asociación y colaboradores que también escriben en el libro. Sólo dos mujeres protagonistas han dado su nombre verdadero, entre ellas María Esperanza Puente Moreno, Portavoz de las Víctimas de AVA.

Además de los padres que han sufrido un aborto provocado, una enfermera relata su experiencia en un centro que hacía abortos clandestinos en los años 70 en Madrid. Y un médico explica cómo ha colaborado en abortos con la píldora del día después. Sirvan estos breves fragmentos de presentación del libro “Yo aborté”. Las mujeres y hombres españoles tienen derecho a saber qué es un aborto y qué pasa cuando se realiza. Es la voz de las víctimas: -Si lo tienes, te lo quitaré-, me amenazaba.
Supongo que cuando veía mi cara de miedo intentaba suavizar lo dicho con caricias. Me explicó tiernamente que era demasiado joven para ser madre, y yo le creí. Además, se ofreció a pagarlo y a solucionarlo todo. Me hicieron el aborto en una clínica privada. Todo era muy frío, incluida la gente que me atendió. Me hicieron una ecografía que no me dejaron ver.

Alicia

Poco tiempo después me avisó que tenía cita en una clínica para abortar. Elisa estaba convencida de que el niño hubiera sido un estorbo para nuestra relación y que, de tenerlo, sería una obligación para los dos y así no saldría nada bien. Hoy estoy seguro de que si hubiera sido firme en mi postura quizá ella hubiera tenido el niño.”

Fernando

Cuando terminó la operación me dijeron que no me preocupara. Los dolores que iba a sentir se pasarían pronto. Después me fui a casa de mi hermana. Tenía la sensación de que lo que había pasado no iba a terminar.

Victoria

"Así que me decidí a abortar. Y él ya tenía el dinero preparado para el aborto: 240 euros. Ese día bebí hasta emborracharme. No quería hacerlo, estaba muy presionada. Pero no encontré ninguna ayuda. Nadie me ofreció otra alternativa al aborto, ni me contó lo que iba a sufrir después por ello. Fui totalmente bebida al aborto… porque no quería hacerlo. Realmente estaba muy presionada… El día que fui me hicieron todo: ecografía, visita del psiquiatra y luego el ginecólogo que me lo hizo.

Lucía

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Victoria Uroz

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