18 diciembre 2004

Providas protestan ante los Juzgados contra el fallo de la deficiente embarazada

L. Á. VEGA

Militantes de dos asociaciones antiabortistas Hazte Oír y la Asociación de Víctimas del Aborto se manifestaron a mediodía de ayer, y durante una media hora, ante los Juzgados de Avilés para pedir que la deficiente gestante de seis meses no sea sometida a una interrupción del embarazo. En la protesta estaban presentes miembros de estas asociaciones llegados de incluso de Madrid y Valladolid. Por otro lado, un partido residual, Familia y Vida, presentó en la mañana de ayer una denuncia contra la decisión judicial de dar libertad a la familia de la deficiente para interrumpir el embarazo.

Los manifestantes portaban todo tipo de pancartas alusivas al caso, con lemas como «Fiscal, defiende la vida de los inocentes, no su ejecución», «Dejen al niño nacer» o «Mujer deficiente más embarazo igual a asesinato prenatal». Entre los concentrados se hallaban sobre todo avilesinos, algunos de ellos miembros de Cáritas y Adoración Nocturna, pero también vecinos de otras partes de Asturias. Incluso pudo verse a un sacerdote.

«Queremos ayudar»

«Queremos ayudar a esa familia a la futura madre a salvar al bebé. Deben saber que hay mucha gente dispuesta a ayudarles. No deben agarrarse a la única solución que se les ofrece, que es el aborto», opinó Conchita Vidal, de Hazte Oír. «Deben tomar en consideración que hay otras vías», añadió, por su parte, José Castro, venido desde Madrid a la protesta.

Por su parte, Victoria Uroz, secretaria de la Asociación de Víctimas del Aborto, aseguró que la intervención «a la que se va a someter a la deficiente puede poner en riesgo su vida. Ese niño es viable, debe nacer y ser dado en adopción», opinó. Para esta asociación, la salida menos traumática es que se practique a la deficiente una cesárea, o que complete el parto. Incluso ha colgado en su página web el testimonio de mujeres que han abortado que «suplican» que no se realice la operación a la deficiente.

Victoria Uroz añadió que su asociación ha recibido cartas de otras entidades, como la Fundación Docete Omnes de La Zubía (Granada), dispuestas a cuidar a la discapacitada hasta que tenga lugar el nacimiento, para posteriormente entregar al niño a una familia dispuesta a criarlo.

La asociación ha iniciado una campaña de envío de correos electrónicos a las clínicas autorizadas para la interrupción del embarazo para que se nieguen a realizar la intervención. «También pedimos al fiscal que pida la revocación de la decisión judicial», añadió Uroz.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Estupendo este post, y la inclusión de fotos, pues como dice el refrán "Valen más unos ojos que cien orejas"

Maricruz